sábado, 23 de septiembre de 2017

hello. goodbye. whatever.

Creo que ya era hora, ¿no? Aún sigo escribiendo aquí aunque claramente dije que a lo mejor y no lo volvía a hacer, pero la vida es así y no la puedes cambiar así de fácil.

Parece que, ahora sí, las cosas se acabaron (incluso la amistad, incluso la confianza); sé que ahora sales con alguien y, sin nada de resentimiento digo, que es una chica bellísima y si ella es quien te hace feliz, las cosas estarán bien. No hace falta pero te diré que la valores y te hagas valorar de ella, quiérela y hazte querer, no caigas en una relación tóxica como fue nuestro caso, busca tu felicidad y si es con ella, hazla feliz.

Ahora entiendo por qué dijiste que no me querías ilusionar y la verdad te comprendo, hiciste lo más correcto dentro de lo posible y yo sé, que las cosas pasan por algo y lo nuestro ya era un ciclo que debía cerrarse.

La verdad quisiera que leyeras esto, no sé si lo harás, no sé si te lo haré llegar, no sé nada pero me quiero desahogar porque guardándome esto no logro nada.

Es duro en incluso incómodo que después de que hayas formado parte de mi vida por casi cuatro años, ahora seamos desconocidos pero es normal y es parte del proceso.

Sé que tú sufriste por mí, no sé si menos, igual o más que yo, pero sufriste y te mereces una nueva oportunidad para querer y sentirte querido. Sólo espero que no me olvides ni olvides las buenas cosas porque de seguro sí las hubo.

He de admitir que te extraño, a todo tu ser y a todo lo que solías ser conmigo pero poco a poco se aprende a dejar de lado las cosas que ya no van más y, aunque no hablemos más, quiero que sepas que te quiero (sí, porque en pocas semanas no dejas de querer, por lo menos yo pienso así).

No sé cómo te encuentres pero la verdad rezo porque estés bien porque en ningún momento te deseo el mal y te lo he manifestado un centenar de veces; que quiero que triunfes, que logres llegar allá donde te lo propongas y que luches por tus sueños. Nunca me voy a arrepentir de ti ni de lo mucho que luché por esto.

El otro día, hablando con mi madre, me hizo caer en cuenta de muchas cosas; mi mamá luchó a capa y espada por mi papá, aunque él no quisiera y mi mami lo logró, mi papi siguió con ella pero no era donde él realmente quería estar, por eso se han hecho tanto daño. Tomé esa experiencia para mi vida y me di cuenta de que no te debía amarrar más y que si tú querías, volverías pero porque tú quieres, no porque yo te obligase.

Tenía tantas cosas por decir antes de empezar a escribir pero la verdad ya no me acuerdo de la gran parte de ellos.

Haz el bien. Actúa correctamente. Sé un buen chico. No confíes en nadie. Valora lo que tienes. Lucha por lo que quieres. Ama sin medida. Ten dignidad. Sueña. Baila. Canta. Sé libre. Sé fiel. Sé amor. Sé lealtad. Sé carisma. Sé grande.

Te juro que llegarás muy lejos. También te juro que estaré siempre como alguien que escucha y hace malos chistes.

Recibe un gran abrazo de mi parte, que todo se dé a tu favor.

Con gran aprecio,

Sofía.

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